Loading.....
Regístrate GRATIS y obtén:
  • Acceso al primer curso de la carrera de Estética Integral.
  • Sitio web para promocionar tus servicios.
  • Asesoría para impulsar tu negocio online.
  • Herramienta CRM de ventas.

Post operatorios en cirugías faciales: Otoplastia

Por Patricia Gonzalez

Anatomía externa del oído

Pabellón Auricular (Oreja)

El pabellón auricular, comúnmente conocido como la "oreja", es la parte visible del oído externo y está compuesto principalmente por cartílago cubierto de piel. Esta estructura tiene una forma y una estructura únicas en cada individuo y cumple una función fundamental en la captación de ondas sonoras del entorno. Además de ser una de las características más distintivas del rostro humano, el pabellón auricular se ajusta de forma precisa a las necesidades auditivas de cada persona. El pabellón auricular se divide en varias partes anatómicas que, aunque parecen sencillas, son cruciales para la función auditiva. Estas partes incluyen:

  • Lóbulo: Es la parte inferior y carnosa del pabellón auricular. Aunque no tiene una función auditiva específica, el lóbulo tiene una gran importancia en términos estéticos y culturales. El lóbulo se caracteriza por ser más suave y flexible, y suele ser el área donde se colocan los pendientes, lo que le otorga una relevancia social y personal en diversas culturas. En algunas personas, el lóbulo puede estirarse con el tiempo debido al uso de pendientes pesados o a la perforación, lo que genera distintas variaciones estéticas.
  • Hélix y Antihélix: Son pliegues cartilaginosos que forman el borde del pabellón auricular. El hélix es el borde externo curvado de la oreja, mientras que el antihélix es el borde interno más prominente, ubicado hacia la parte superior de la oreja. Estos pliegues ayudan a dirigir las ondas sonoras hacia el canal auditivo externo. El hélix, en particular, tiene un papel en la configuración del sonido que se escucha, ya que facilita la recolección de ondas sonoras provenientes de diversas direcciones. Su forma curvada ayuda a amplificar ciertos sonidos y a dirigirlos de manera eficiente hacia el conducto auditivo externo.
  • Trago y Antitrago: Son prominencias en el borde del pabellón auricular. El trago está situado en la parte frontal del conducto auditivo externo, justo por delante de la apertura del canal auditivo. El antitrago, por su parte, se encuentra en la parte posterior del pabellón auricular, opuesto al trago. Ambos desempeñan un papel en la protección del canal auditivo, ya que ayudan a regular el paso del aire y las ondas sonoras, además de proteger el conducto auditivo de objetos extraños y vibraciones excesivas. Su función es fundamental para evitar que ruidos fuertes o sonidos de alta frecuencia entren de forma directa al oído, lo que podría causar daño a la estructura interna del oído.

Conducto Auditivo Externo

El conducto auditivo externo es un canal curvo revestido de piel que conecta el pabellón auricular con el tímpano. Este canal tiene una longitud aproximada de 2.5 cm en adultos, y su diámetro varía entre 0.7 y 1 cm. Su función principal es conducir las ondas sonoras desde el exterior hacia el tímpano, donde las vibraciones son percibidas y transmitidas al oído medio. El conducto auditivo externo está protegido por cerumen, una sustancia cerosa producida naturalmente en el oído. El cerumen cumple varias funciones esenciales: atrapa partículas extrañas, como polvo y suciedad, y actúa como barrera contra infecciones al tener propiedades antimicrobianas. Además, el cerumen ayuda a lubricar el conducto auditivo, evitando que se reseque y se irrite.


El conducto auditivo tiene una curvatura natural, lo que contribuye a una mejor dirección y amplificación de las ondas sonoras. Su tamaño y forma influyen directamente en la capacidad de amplificar los sonidos que llegan al oído. El canal auditivo está ligeramente inclinado hacia adelante y hacia abajo, lo que permite que los sonidos provenientes de todas las direcciones sean captados más eficientemente. Esta curvatura también ayuda a mantener el canal protegido de la entrada de agua y otros agentes externos. Además, esta estructura está conectada con la faringe a través de la trompa de Eustaquio, un conducto que ayuda a equilibrar la presión dentro del oído medio con la presión atmosférica externa, garantizando un correcto funcionamiento auditivo.

En resumen

La anatomía externa del oído está diseñada no solo para capturar y amplificar las ondas sonoras, sino también para proteger los delicados órganos internos que participan en el proceso de audición. Cada una de las estructuras mencionadas cumple un papel vital en la percepción del sonido y en la protección del oído frente a daños y agentes externos. La interacción entre estas partes permite que el oído externo sea un sistema altamente eficiente y especializado en la recepción de estímulos acústicos, facilitando el proceso de audición. Esta complejidad y especialización aseguran que el oído externo pueda cumplir con su función de manera óptima, protegiendo al oído interno y al mismo tiempo mejorando la capacidad para percibir sonidos con claridad y precisión.

Fuentes Bibliográficas 

Tortora, G. J., & Derrickson, B. (2020). Principios de Anatomía y Fisiología. Editorial Médica Panamericana.
Netter, F. H. (2020). Atlas de Anatomía Humana. Elsevier Health Sciences.
MedlinePlus. Oído externo – Función y estructura: https://medlineplus.gov/ency/article/002294.htm
American Academy of Otolaryngology – Head and Neck Surgery: https://www.entnet.org
 

Aportes y preguntas

¿Algo no quedó claro en la clase? ¿Tienes ideas para compartir? Este es el lugar para hacerlo.

Espero estés disfrutando de esta clase

¿Quieres que mi equipo te ayude a crecer en estética integral? Agenda una llamada.

Agendar