Aplicación de la Anestesia

Al igual que en la micropigmentación de aréola o cualquier otro tratamiento estético, la higiene es fundamental y siempre ha de ser necesario limpiar la zona a tratar y así poder ofrecer un procedimiento impecable.

Debes tener presente el hecho de que trabajarás con una aguja que penetrará la piel para que el pigmento se pueda adherir. Es por ello que la zona debe estar completamente limpia, para que así no penetre junto con el pigmento cualquier rastro de suciedad que pueda haber.

Una vez que la zona se encuentre impecable, podrás dar inicio al procedimiento como tal, para lo cual lo principal es aplicarla anestesia tópica y dejar actuar por unos 30 minutos para que haga efecto.

Antes de comenzar a utilizar el dermógrafo, lo ideal es realizar líneas guías con el lápiz encerado.

Bien es cierto que este es un procedimiento mínimamente invasivo que apenas penetra hasta la primera capa de la piel y que no ocasiona dolor como tal. Pero también es cierto que puede ocasionar molestias, lo cual puede evitarse con el uso de la anestesia tópica, siendo una solución ideal e incluso necesaria para pieles sensibles.

Por otra parte, no debes olvidar que el área de la cabeza es muy extensa y a pesar de que seguramente este procedimiento deba llevarse a cabo en varias sesiones, de igual forma puede ocasionar una pequeña irritación debido al constante uso del dermógrafo, de tal manera que mientras desinflama la zona, el paciente no sentirá molestia gracias al uso de la anestesia.