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Dermatología I
Por Karen Zarate
Estrategias Efectivas para el Manejo del Envejecimiento y Fotoenvejecimiento de la Piel
Los tratamientos actuales para el fotoenvejecimiento buscan reparar el daño existente, estimular la regeneración cutánea y prevenir nuevas lesiones. Estos tratamientos pueden clasificarse en tratamientos cosméticos, tratamientos dermatológicos, y procedimientos que utilizan dispositivos, ya sean de uso cosmético o médico estético. Es fundamental evaluar las concentraciones de los ácidos en los tratamientos despigmentantes, así como seleccionar adecuadamente el tipo de aparatología, que en el manejo cosmético y cosmetológico no debe ser en ningún caso invasivo.
Tratamientos Cosméticos y Cosmetológicos
Estos incluyen tratamientos no invasivos destinados a mejorar la apariencia de la piel, que pueden realizarse en centros de estética y que usan principios activos y dispositivos no invasivos.
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Principios activos tópicos:
Colágeno y Elastina
Son proteínas fundamentales en la matriz extracelular de la piel. El colágeno proporciona resistencia y estructura, mientras que la elastina otorga elasticidad y capacidad de recuperación. Su presencia y calidad determinan la firmeza y tonicidad cutánea. Con el envejecimiento, la síntesis de estas proteínas disminuye, causando flacidez y arrugas. Por ello, su aporte mediante tratamientos tópicos o estimuladores es clave para mejorar la apariencia y salud de la piel.
Silicio Orgánico
El silicio orgánico es un mineral esencial para la síntesis y mantenimiento del colágeno y otros componentes estructurales de la piel. Favorece la reparación tisular y ayuda a mantener la elasticidad y firmeza cutáneas. Además, contribuye a fortalecer tejidos conectivos, mejorando la hidratación y resistencia frente al envejecimiento y daño ambiental.
Piruvato Sódico
Es un metabolito clave en el ciclo energético celular que estimula el metabolismo y la producción de energía en las células cutáneas. Esto favorece la regeneración celular, la síntesis de proteínas y la reparación de tejidos dañados. Su aplicación contribuye a revitalizar la piel envejecida, mejorando su textura y luminosidad.
Oligoelementos Minerales y Vitaminas
Estos micronutrientes son esenciales para el correcto funcionamiento celular y la defensa antioxidante de la piel. Vitaminas como la C y la E tienen un papel destacado como antioxidantes, protegiendo las células del daño causado por los radicales libres y la radiación UV. Los oligoelementos minerales, incluyendo zinc, cobre y selenio, participan en procesos de cicatrización, síntesis de colágeno y mantenimiento de la integridad cutánea.
Factores de Crecimiento
Son proteínas bioactivas que regulan la proliferación, diferenciación y migración celular. En la piel, promueven la reparación de tejidos, la formación de colágeno y elastina, y la regeneración de estructuras cutáneas. Su uso en tratamientos estéticos y dermatológicos ayuda a acelerar la recuperación de la piel y a mejorar su aspecto general, siendo fundamentales para tratamientos antienvejecimiento.
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Dispositivos cosméticos no invasivos:
Dermapen (microneedling o inducción percutánea de colágeno): dispositivo que utiliza microagujas para estimular la producción de colágeno y elastina de forma segura, mejorando la textura y firmeza cutánea. Otros dispositivos de radiofrecuencia, galvánica, electroporador o ultrasonido.
Tratamientos Tópicos
Estos tratamientos aplican principios activos directamente sobre la piel para estimular su renovación, exfoliación o despigmentación. Su concentración y uso deben ser cuidadosamente evaluados para evitar irritación o daños.
Ácido Retinoico (tretinoína):
Estimula la renovación celular, la formación de colágeno y la angiogénesis.
Hidroquinona y ácido kójico:
Agentes despigmentantes usados para tratar hiperpigmentaciones y manchas solares, cuya concentración debe ser estrictamente controlada para evitar daños cutáneos.
Vitaminas antioxidantes (C y E):
Dosis diarias de vitamina C (aprox. un gramo) y vitamina E (mil unidades internacionales) en ciclos de tres meses ayudan a neutralizar radicales libres y proteger la piel.
Alfa Hidroxiácidos (AHA), Polihidroxiácidos (PHA) y Beta Hidroxiácidos (BHA):
Estos grupos de ácidos son ampliamente utilizados en el tratamiento del envejecimiento y fotoenvejecimiento cutáneo debido a sus propiedades exfoliantes, renovadoras y estimulantes de la piel.
Alfa Hidroxiácidos (AHA):
Incluyen el ácido glicólico, cítrico, láctico y málico. Actúan principalmente exfoliando el estrato córneo, promoviendo la renovación celular y estimulando la producción de colágeno y glicosaminoglicanos en la dermis. Esto mejora notablemente la textura, firmeza y uniformidad del tono de la piel.
Polihidroxiácidos (PHA):
Son ácidos con una estructura molecular más grande que los AHA, lo que les confiere una exfoliación más suave y menos irritante. Se utilizan para mejorar la hidratación, proteger la barrera cutánea y tienen propiedades antioxidantes, siendo ideales para pieles sensibles o con problemas de envejecimiento superficial.
Beta Hidroxiácidos (BHA):
El ácido salicílico es el principal representante de este grupo. Tiene propiedades lipofílicas que le permiten penetrar en los poros, ayudando a disolver el sebo y exfoliar las células muertas, lo que mejora la textura cutánea y previene la formación de comedones y lesiones asociadas al envejecimiento y fotoenvejecimiento.
Fotomodulación LED de diferentes colores, mejorando el funcionamiento de la piel a nivel celular y favoreciendo la formación de colágeno y elastina.
Es importante que las concentraciones de estos ácidos se evalúen cuidadosamente según el tipo de tratamiento a realizar, ya sea cosmético o dermatológico, para maximizar la eficacia y minimizar posibles efectos adversos en la piel.
Tratamientos Dermatológicos
Estos procedimientos suelen realizarse en clínicas médicas especializadas, requieren evaluación profesional y pueden implicar mayor riesgo o necesidad de cuidados postratamiento.
IPL y/o Láser para Mejorar la Calidad de la Piel
La luz pulsada intensa (IPL) y los tratamientos con láser son tecnologías que estimulan la producción de colágeno y elastina en la piel. Estos procedimientos son altamente eficaces para mejorar la textura cutánea, reducir cicatrices, atenuar estrías y corregir alteraciones pigmentarias. Se aplican en zonas específicas como el área periorbital, perioral y el rostro completo, promoviendo una apariencia más uniforme, firme y rejuvenecida.
Toxina Botulínica
La toxina botulínica es un tratamiento médico-estético que actúa relajando los músculos responsables de las arrugas dinámicas, como las del entrecejo, la frente y las patas de gallo. Su aplicación ayuda a suavizar estas líneas de expresión, proporcionando un aspecto más descansado y juvenil.
Rellenos Dérmicos con Ácido Hialurónico
Los rellenos dérmicos a base de ácido hialurónico se utilizan para restaurar volúmenes perdidos y suavizar surcos profundos, como los pliegues nasolabiales o las líneas de marioneta. Este ácido, de origen natural, atrae y retiene agua en la piel, mejorando su hidratación y elasticidad.
Lifting Facial Quirúrgico
El lifting facial es un procedimiento quirúrgico indicado en casos avanzados de flacidez cutánea y pérdida significativa de firmeza. Este tratamiento busca reposicionar y tensar los tejidos faciales, devolviendo una apariencia más joven y contorneada. Es un método definitivo para corregir signos profundos de envejecimiento, aunque requiere un período de recuperación y evaluación médica cuidadosa.
Mesoterapia
La mesoterapia consiste en la aplicación de pequeñas microinyecciones, generalmente indoloras, en las áreas afectadas por el fotoenvejecimiento, como el rostro, cuello, escote y manos. A través de esta técnica se administran principios activos como ácido hialurónico, vitaminas, plasma rico en plaquetas y otros nutrientes que estimulan la producción de colágeno y mejoran la calidad de la piel.
Consideraciones importantes
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En tratamientos despigmentantes, evaluar cuidadosamente la concentración de los ácidos para evitar irritación, quemaduras o hiperpigmentación.
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La aparatología utilizada en el manejo cosmético y cosmetológico debe ser no invasiva, priorizando la seguridad y la tolerancia cutánea.
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La correcta combinación de tratamientos tópicos, dispositivos cosméticos y, en casos indicados, procedimientos dermatológicos, optimiza los resultados y asegura un abordaje integral del fotoenvejecimiento.
Referencia Bibliográfica
Durán, M. M. Envejecimiento y fotoenvejecimiento.

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